vuelvo a escribir después de estar unas semanas en barbecho...
El caso es que me había propuesto publicar al menos cada quince días, pero parece que lo de mami primeriza te quita muuuuuucho tiempo, pero de verdad de la buena ;)
Esta semana quería hablaros de lo mismo que todo el mundo... La vuelta al cole. :)))
Como cada año, para muchos maestros y maestras, parece que en realidad el año empieza el uno de septiembre, y no el uno de enero. Ya se sabe que somos una buena cantidad de interinos e interinas que empezamos en cole nuevo, con nuevo grupo de niños y niñas, y por supuesto, nuevos compañeros y compañeras. Además, en la mayoría de los casos, es también nueva ciudad, a tropecientos quilómetros de tu casa y de tu familia.
Pero no voy a hablar de eso en este post.
En realidad, mi intención es hablar de la organización.
A mí personalmente, me gusta mucho... no, más bien siento la imperiosa necesidad de organizarme a conciencia en cuanto empieza septiembre. Organizar mi trabajo, preparar los materiales que voy a necesitar, al menos las primeras semanas, planificar lo que voy a hacer, cómo y cuándo, etc.
Por este motivo, llega septiembre, y ya tengo agenda nueva... bueno, en realidad suelen ser agendas, con S, porque suelo tener al menos dos, la del cole, y la que llevo en el bolso. Eso, si no tengo otra en casa.
Así que este año, me la compré, como siempre. Sin embargo, supongo que a mucha más gente le pasa como a mí, que la mayoría de las veces siento que se me quedan cortas. O bien no tienen todos los apartados que me gustaría, o el dietario no llega hasta más allá de julio del año siguiente, etc.
Total, que a veces acabo añadiendo yo papelitos, post-it, o notitas de toda clase, de manera que al final en lugar de una agenda parece un caos.
Bueno, pues todo esto que explico viene a colación porque este año he descubierto un sistema que me ha encantado.
Se llama BULLET JOURNAL, y su creador es Ryder Carroll. No os voy a explicar con detalle cómo funciona, porque aquí abajo os dejo el link a su página, donde ya lo hace él, de una manera muy sencilla.
Sí que os diré que es un sistema muy sencillo (analógico, claro) para llevar al día todas tus tareas, eventos, etc. Y claro, a mí, que me paso la vida haciendo listas, me ha enamorado por completo.
Sin embargo, lo divertido consiste en no quedarse ahí, en el modelo de Ryder Carroll, y seguir investigando, innovando y creando. La gracia de esta libreta que tú rellenas desde cero está en que el límite es el cielo. Por eso, si buscamos en Youtube, encontramos infinidad de vídeos de chicas (digo chicas, porque sólo he encontrado chicas que lo hagan, pero si alguien tiene vídeos de chicos, que lo escriba en los comentarios, porque también me gustaría verlos) explicando cómo habían elaborado y decorado sus Bullet Journal. De verdad que algunos son obras de arte. Yo dejo aquí un par de links, de los que más me han gustado, pero como ya he dicho antes, el tope es el cielo.
Por otra parte, como he seguido buscando ejemplos para empezar el mío, también me he topado con una página estupenda donde su autora, Sara, te da un montón de consejos superprácticos para organizarte en el día a día, además de otras ideas para trabajar tu creatividad y tus aptitudes para innovar. De hecho, me he suscrito a su newsletter y me declaro fan absoluta suya. Así que os invito a que la conozcáis también a través de este link.
Así que, después de ver todas las posibilidades, me he lanzado a empezar mi propio bullet journal, y aquí os dejo algunas fotos, para que podáis ver el resultado, a ver qué os parece.
Espero que os guste.
¡Feliz semana!
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